Saber cómo limpiar las paredes blancas para que estas luzcan como el primer día es lo que nos hemos propuesto con este post.
Utensilios para limpiar las paredes blancas
Limpiar las paredes blancas es una tarea fácil, sobre todo si cuentas con los utensilios adecuados, de lo contrario, lejos de solucionar el problema, estaremos acrecentándolo.
A continuación te mostramos una serie de utensilios que te vendrán muy bien para eliminar la suciedad de las paredes sin dañar la pintura ni dejar residuos.
Trapos suaves y limpios
A la hora de quitar el polvo de la pared podemos usar tanto un plumero como trapos trapos de microfibra. También puedes usar paños de algodón o esponjas no abrasivas.
Esponjas no abrasivas
Las esponjas de celulosa o esponjas de cocina son excelentes para eliminar manchas y suciedad de las paredes.
Jabón neutro
Usa un detergente suave o un jabón neutro para crear una solución de limpieza suave. Evita productos de limpieza abrasivos que puedan dañar la pintura.
Cubo
Utiliza un cubo para mezclar la solución de limpieza y para enjuagar los trapos o esponjas.
Agua tibia
En multitud de ocasiones utilizando agua tibia será suficiente para limpiar la pared. Evita el agua caliente, ya que puede dañar la pintura.
Limpiador alcalino
De forma opcional y siempre que se trate de manchas difíciles puedes utilizar un limpiador alcalino. Se recomienda usar con precaución y probándolo en una zona reducida antes de aplicarlo a toda la pared.
Pasos para limpiar las paredes blancas
A la hora de limpiar las paredes blancas es importante hacerlo correctamente para evitar disgustos. Para ellos recomendamos seguir los siguientes pasos:
Preparación
Retira cualquier objeto como cuadro, espejo o elemento decorativo de la pared para facilitar su limpieza.
Se recomienda limpiar la pared de arriba a bajo para evitar que el agua y la suciedad goteen sobre áreas que ya has limpiado.
Asegúrate de ventilar bien la habitación para permitir que seque más rápido.
Prueba en una pequeña área
Antes de empezar a limpiar toda la pared, prueba en una pequeña sección donde no sea muy visible para asegurarte que no cause daño o decoloración.
Mezcla el jabón neutro con el agua tibia en un cubo.
Limpia las paredes
Moja un trapo suave o esponja en la solución jabonosa.
Para evitar que gotee, elimina el exceso de agua del trapo.
Limpia suavemente las paredes, trabajando en secciones pequeñas. Realiza movimientos circulares o de arriba abajo.
Presta atención a las áreas más sucias o manchadas y frota con más cuidado si es necesario.
Enjuaga y seca
Utiliza un trapo limpio y húmedo para enjuagar la superficie de las paredes y eliminar cualquier residuo de jabón.
Luego, seca las paredes con un trapo limpio y seco para evitar que queden marcas de agua o manchas.
Con qué frecuencia tengo que limpiar las paredes blancas
Las paredes blancas generalmente requieren una limpieza a fondo cada seis meses aproximadamente. En el caso de tener niños o animales, la frecuencia se reduce, estableciendo el periodo de limpieza en función del volumen de suciedad acumulado.
Las paredes blancas necesitan limpiarse cuando aparecen los siguientes signos:
Polvo visible en las paredes
Desgaste en las paredes
Suciedad en las paredes
Telarañas en las esquinas
Consejos para mantener limpias las paredes durante más tiempo
Limpia las manchas con regularidad y así evitar que las manchas se absorban en la pared
Aspira con cuidado para evitar que la suciedad del suelo se impregne en las paredes
Quita el polvo del techo, especialmente el generado en los ventiladores. El uso de un ventilador de techo esparce polvo por toda la casa, que se queda pegado a las paredes.
¿Y tu, cada cuánto limpias las paredes blancas de tu vivienda?